
Caballo de Troya, enemigo en casa. Llámenlo como quieran, pero está quedando claro durante toda la temporada y la anterior, que Bradley Beal es uno de los peores fichajes de la historia que se han hecho en la NBA, por parte de Phoenix Suns. Nunca se ha adaptado al esquema de juego de los de Arizona, ha mermado las opciones de gloria de Durant y Booker y ha bloqueado su traspaso. Ahora, hay estadísticas NBA que arrojan luz.
Un proyecto completamente fallido. Solo así puede definirse lo que está sucediendo en Phoenix Suns desde que decidieron armar un Big 3 en el que Bradley Beal sería la tercera espada. Abandonaba sus Wizards para ceder soberanía por un bien colectivo, pero desde los primeros encuentros quedó claro que no iba a saber adaptarse a un rol secundario y que su esfuerzo defensivo era nulo. Es este aspecto la mayor rémora para su equipo, así como la cláusula antitraspaso que condiciona el futuro de la franquicia.
Actualmente, si nos fijamos en el Net Rating, estadística NBA muy precisa para medir el rendimiento coral de un equipo, vemos cómo Phoenix Suns está ubicado en el puesto 17 de toda la NBA. Pues bien, si eliminamos de la ecuación los minutos en que han jugado con Bradley Beal en cancha, estarían en el puesto noveno, teniendo el séptimo mejor ataque de toda la NBA (ahora tienen el octavo) y la duodécima mejor defensa, en contraposición al puesto 26 que ocupan actualmente. Escalofriantes datos que dejan al jugador en una situación muy precaria.
The Suns are a great team this year when Bradley Beal isn’t on the court:
— Evan Sidery (@esidery) March 20, 2025
116.2 OffRtg (7th)
112.5 DefRtg (12th)
+3.7 NetRtg (9th)
Phoenix also holds a 10-3 record, a 63-win pace, when Kevin Durant and Devin Booker play together without Beal. pic.twitter.com/JqtOs82dJH