Los Cleveland Cavaliers continúan escribiendo historia tras vencer a los Charlotte Hornets 128-114, manteniendo su récord perfecto esta temporada. Liderados por Darius Garland con 25 puntos y un Ty Jerome que igualó su mejor marca personal con 24 puntos en reemplazo de Donovan Mitchell, los Cavs han alcanzado un inicio de temporada de 15-0, empatando el segundo mejor arranque en la historia de la NBA. Solo los Golden State Warriors de 2015-16 lograron un mejor registro al comenzar 24-0 en su histórica campaña de 73 victorias y 9 derrotas.
El equipo de Cleveland se une a los Warriors, los Houston Rockets de 1993-94 y los Washington Capitols de 1948-49 como los únicos equipos en alcanzar este hito. Además, el dominio de los Cavs no se limita a sus estrellas principales, ya que Evan Mobley aportó 23 puntos y 11 rebotes, mientras que Jarrett Allen registró 21 puntos y 15 rebotes. Es la primera vez desde 1972 que los Cavaliers tienen cuatro jugadores anotando al menos 20 puntos en partidos consecutivos, consolidando así su profundidad ofensiva.
Con este triunfo, los Cavaliers extienden la racha ganadora más larga en la historia de la franquicia, ofreciendo a los aficionados de Cleveland un motivo de alegría en una temporada difícil para los Browns en la NFL. Jarrett Allen destacó cómo la energía de la ciudad ha sido clave en este momento histórico: "Es increíble cómo Cleveland nos ha adoptado. Nos apoyan en cada partido, gritando por todo. La ciudad está con nosotros", comentó el pívot.
Racha bestial
Aunque la racha es importante, el equipo priorizó el descanso de Donovan Mitchell, consciente de que la temporada es larga y con desafíos más grandes en el horizonte. Kenny Atkinson, entrenador en su primer año al mando de los Cavs, elogió el impacto positivo de la racha en el desarrollo del equipo, incluyendo el tiempo de juego para la banca. A pesar de enfrentar adversidades, como las lesiones de Isaac Okoro y Dean Wade en la segunda mitad, el equipo mantuvo su nivel competitivo.
El próximo reto de los Cavaliers será contra los campeones defensores, los Boston Celtics, en el TD Garden. Este encuentro representa no solo un desafío en su racha perfecta, sino también una oportunidad de medir su potencial contra uno de los equipos más fuertes de la liga. "Es una gran prueba para nosotros", señaló Atkinson. "Queremos ver dónde estamos, qué ajustes necesitamos y hacia dónde vamos. Este partido llega en el momento perfecto".