Es el gran debate de los últimos tiempo en la NBA, el caso que ocupa todos los rumores y hace que se planteen diversos escenarios. Jimmy Butler está forzando hasta límites insospechados su situación en Miami Heat, confirmando esa mala fama que le ha acompañado en toda su carrera deportiva y situando a la organización de Florida en una situación comprometida.
Lo que quizá nadie esperaba es que fuera cobrando sentido una postura extrema por parte de la gerencia de Miami Heat. Y es que esta es una franquicia con mucha historia y personas influyentes y de mucho carácter en la dirección, que están indignados con la manera en que Jimmy Butler está gestionando todo este asunto. Siguen sin estar satisfechos con lo que ofrecen los equipos más interesados en el jugador y están dispuestos a mantener el pulso que el jugador ha comenzado.
Declararse en rebeldía, tal y como ha hecho Jimmy Butler, puede haber desatado la caja de los truenos. Sin embargo, lo que quizá no pensaba el jugador es que Miami Heat tendría la sangre fría de esperar con paciencia y poner al jugador en la disyuntiva de tirarse medio año sin competir o volver al equipo una vez no hayan aceptado ofertas. Según nbaanalysis.net, esa opción está ganando fuerza.